Los filósofos ilustrados cometieron un error de juicio: la educación no eleva la condición humana, lo hace el desarrollo de la reflexión. Por eso, la educación del presente -y la del futuro- pasa por estimular a los alumnos a ejercer el pensamiento, a dudar, a plantear posibilidades con fundamentos analíticos y rigurosos.
Escribo esta semana en Ethic acerca de la Institución Libre de Enseñanza y del aclamado modelo finlandés. ¿Qué poseen en común que los hace tan especiales?
Puede hacer click en el siguiente enlace para leer el artículo.
Lo que nos enseña la ‘rara avis’ de la educación finlandesa – Ethic